martes, 11 de diciembre de 2007

Cambiá de piel - supieron decirle hace un buen tiempo.

Todo era en vano, desde empezar de cero hasta tocar fondo y rebotar [o caerse y quebrar en el intento], era como si a ella poco le importase todo lo que la rodeara, dichoso aquel que supo tenerla en brazos y besar las heridas que su propia cruz marcó en su piel, dichoso aquel que peleó contra viento y marea, navajas y espadas, demonios, pájaros y jaulas oxidadas; y logró la victoria.
Dichoso aquel..si realmente hubiese existido.

Tanta frialdad te penetrará los huesos, y éstos mismos quedarán débiles, tal como lo sos vos ahora - supieron decirle hace un buen tiempo.

Todo era confuso, desde la elección de su vestuario todos los días, hasta la bola de pensamientos y reflexiones que generaba en el ómnibus camino a casa.
Era increíblemente admirable la capacidad que poseía para maquinar tanto su cabeza, para autogenerarse problemas a los cuales se negaba [inconscientemente] a buscarles una solución.
Era admirable la capacidad que poseía para llevar consigo un estado anímico neutral, era como si apretaras un botón sobre su hombro izquierdo, si estaba en un estado tranquilo, con la presión del botón se volvía eufórico, si estaba triste se volvía alegre, y así sucesivamente.
Era como si todas sus emociones, sentidos y demás dependieran del contexto en el cual se encontrase sumergido, a veces, era como si viviera en un coma galopante los 365 días del año, incluso hasta da la impresión de que era falso, hipócrita, o simplemente, neutral.

Gris es un buen término para describirlo, pero me gusta más el azul, azul azul y azul.
Azul, símbolo de tristeza, estabilidad, inestabilidad, melancolía y nostalgia. Siempre adecué esas palabras a ese color, como también tengo la costumbre de identificar gente con colores, por ejemplo:

Mari
es verde, pero no un verde apagado, es un verde enérgico, verde alimonado..verde verano.
Gaby es fuxia, alegre y de carácter fuerte, fuerte como la tonalidad del color.
Nadia es rojo, es apasionada, posee una fortaleza que merece admiración, es ése color que siempre te queda bien.

Y él..es azul, esa tonalidad tan pacífica, pacífica y peligrosa al mismo tiempo. Melancólico, poseedor de una tristeza galopante que es simplemente hermosa, tan hermosa que no se aplica al término Triste, es más bien nostálgico, un nostálgico del siglo veintiuno con una fachada semejante a la esperanza, a la claridad de las cosas, te da esas ganas, esa fuerza..
Y al mismo tiempo, te despoja de lo que alguna vez supo ser tu coraza de acero, impenetrable. Te sentís vulnerable, sola pero rodeada de gente, estúpida, inferior, minúscula, diminuta y demás derivados. Sentís que te puede, que te supera y que caés, y es ahí cuando sentís que todo colapsa en un mar de confusiones absurdas y paranoiqueos constantes, y te volvés histérica, y te carcomés la cabeza, y pensás en todas las hipotéticas posibilidades que se te ocurren en fracciones de milésimas de segundos, y todas son no-favorables para vos, y te sentís mal y hacés catarsis. Y después vuelve, con su tranquilidad y sencillez, vuelve y todo pasa, todo pasa. Sonreís, como estúpida, pero sonreís y sentís que tenés el mundo por delante y nada te va a detener. Y caés, caés de nuevo, pero ésta vez es cuando te preguntás ¿cómo un ser tan sencillo da a parar conmigo? yo, yo que soy la paranoia personificada, el pesimismo pseudo realista de los hechos y las endorfinas consumidas por tanta decepción con el mundo. ¿Cómo es posible? y ahí comenzás a cuestionarte todo, palabra por palabra que nace y muere en su boca, movimiento, miradas, gestos y frases con doble sentido [
artimañas que utilizo a la perfección, pero cuando sobre mi las aplican, generan una persecución de ideas y sentimientos que derivan en la confusión constante].
Hasta que te cansás, te aburrís y mandás todo al carajo, y es ahí, es ahí cuando por un instante te volvés un ser sencillo, y es ahí, es ahí cuando entendés el significado de todo.

Es cuestión de cambiar de piel, luchar contra viento y marea, navajas y espadas, demonios, pájaros y jaulas oxidadas. Es cuestión de cambiar de piel.

3 comentarios:

Eugenia S. dijo...

Ahora somos auspiciantes. Sin duda que encantada de ser la tuya, por algo te recomendé. Me haces pensar. ¿Cambiar de piel por un rato? Debería de ser así, si no careceríamos de nosotros mismos. No sé, me creaste una crisis :P

Beso!

NandoXXI dijo...

Oooooh! ya me gustaría a mi que me escribieran algo asi, hace como 5 años una vez... alguien me escrbio algo parecido, pero a quien le importa, lo que quiero que sepas es que me encanta tu ogra.. digo obra, y que voy a pasar mas seguido por tu Blog

NandoXXI dijo...

Ah! y yo ya las agregué a las dos en mis en las cés para lamente... jem.