Crónicas de una idiota.

Hola, soy Silvina y soy estúpida. Tengo mala suerte también, pero soy estúpida.
¿Alguien alguna vez perdió dos cosas de importancia - a nivel material - dos fin de semanas seguidos? Nadie, ¿verdad? Bueno, yo sí.

Dudé en subir esto, pero después, pensándolo bien dije "Y bue..la gente tiene que reírse. Por lo menos, de mí." y como son cuatro o cinco los que me leen - y de los mismos, uno o dos que no me conocen personalmente -, no me molesta. Más que un "ha ha, idiota" por msn no me van a decir, así que..Mátense.

El sábado cinco de mayo, corriendo el año 2007, fui a un boliche en Ciudad Vieja por el cumpleaños de uno de mis mejores amigos [creo], dicho boliche era Almodóbar.
Empecemos por lo primero: Yo caí con una amiga a las..01:00 y mi MEJORRR amigo cayó 3:30 am, a todo esto, desde que habíamos entrado hasta ese momento, estaban pasando música.electrónica.estilo.todo.punta. lo cual me paspó. Pero me divertí viendo a todas las minas curtiendo electrónica fea.
Bueno, prosigo. Entre trago va y trago viene [o sea, un pedo cuadriculado elevado a la circunferencia de la tangente de la patada en el tuje que me dió mi vieja cuando le conté lo que perdí] me encontré una campera muy atractiva en el piso, a lo que, disimuladamente [no] me agaché [en realidad, me tiré] y la recogí [me la encanuté]. Yo me reía y me reía de la pobre gila que había perdido tal campera. Eso se llama "ser mala persona".
Cerca de la hora de retirada; ya con un pedo que superaba mi capacidad motora y psicológica, se me ocurrió revisar mi bolsito y sacar mi celular.

- Bo..no tengo el celular.
*Ay no jodas, dale ¿buscaste bien?.
-Sí..y no está. Me van a coger cuando llegue..

Buscando por todo el puto boliche el celular, pero no aparecía. Se había ido, lejos, muy lejos. Seguramente estaba cansado de que lo maltratara; claro, nunca lo ponía a cargar, lo daba contra todo, se lo prestaba a gente que lo utilizaba con el único fin de abusar de sus juegos, como el famoso "New York Nights" que ya no está más con nosotros.
Me fui del lugar, enojada, desesperada, y alcoholizada. Pero me fui con una campera re abrigada y linda. Me quedaba perfecta [bueno, un poco corta.].

Llegué a casa como a las 8:00 [en realidad antes, pero mi amigo, Miguel -el cumpleañero-] me hizo el aguante del "after pedo", claro, yo no podía ni pararme sola, era desesperante.
Entro - con sumo cuidado - , cierro con llave - luego de tres intentos fallidos que duraron 10 minutos -, y me dirijo a mi cuarto, no sin antes despertar a mis padres y transmitirles la terrible noticia. Pero no pude. ¿Viste cuando llegas de una noche larga y de mucho vicio y ves a tus padres, durmiendo tranquilamente?. Bueno, eso me pasó a mi. Entonces fui a mi cuarto, cerré la puerta y me dormí.
Al otro día, mi madre me levanta con desayuno en mano y diciéndome "andá a mi cama, dale, andá a acostarte allá" - en casa, es una tradición que todos los domingos de mañana, cuando me levanto, les invada su "somier" gigante y esponjoso -. Fui, desayuné y me dormí de nuevo.
A las 14:00 me levanto, con resaca y le digo "me vas a matar, pero perdí el celular".

* Inserte aquí todas las puteadas posibles que incluyan palabras como "plata", "basura", "7000", "estúpida", "borracha", etc. *

Veinte minutos después, mamá se calmó. Mientras, mi padre se reía - para no rajarme a puteadas - y hacía chistes sarcásticos acerca de mi capacidad intelectual.

En este momento, querido lector, debe estar riéndose, rascándose la panza [si es hombre] y diciendo para sus adentro [o en voz alta] "que mina pelotuda"; pero para su deleite personal - porque todos nos reímos de las desgracias ajenas, está en nuestra naturaleza -, la historia no termina acá.

El sábado pasado, véase como sábado 12 de mayo del 2007; salí con mis ex-compañeros de liceo. Y fuimos a Ciudad Vieja.
Entre idas y vueltas de "¿a qué boliche vamos?" y comentarios como "yo voy solo por el alcohol"; "pero mirá el ambiente, ahí no entro"; "en la calle donde se cayó el edificio boludooo"; "si salís con mujeres, y sos hombre, y sos minoría, y no querés quemarte la cabeza, seguilas. Vos seguilas, es lo mejor que podés hacer y te ahorrás problemas" ; logramos entrar [por decisión de la barra brava - Luciana -] a un boliche del cual cuyo nombre no quiero acordarme.
Entramos..bleh, no era la gran cosa y habia un tipo cantando "Wonderwall" de Oasis, eso encaró.
Pero claro, no todo es perfecto y tuvimos que ir -tuve- a la pisa de "LATINO" [una vez que el alcohol corre por las venas, uno lo acepta y se lo banca, como macho de campo. Aunque en mi caso, sería como Hembra de campo. ((¿?))].
Yo nunca dejo mis pertenencias en ropería, pero bueno, no quería cargar con la campera que me había ganado el sábado - ¿Se acuerdan? la campera que me encontré. -. Así que fuimos con el Carra a dejar las camperas. Los dos papelitos estaban en mi billetera, mi hermosa billetera con todos mis documentos - menos la credencial. Que está bien guardada en el Registro Cívico xq nunca la fui a buscar y no lo pienso hacer hasta que sea justo y necesario ((¿?))].
Fui a cobrarme la consumición arriba y volví. Fuimos a fumar un cigarro en el mini patio del boliche. Cuando vuelvo a la pista de "latino", se me dá por sacar la billetera [que por cierto, es gigante. Aquellos que tuvieron el gusto de conocerla - sí, tuvieron - lo saben], pero no, la billetera no estaba. Había desaparecido. Tengan en cuenta que tenía plata, documentos, direcciones, fotos carné que dejan mucho que desear y un dólar. Y lo perdí. Todo.
Ah, y los papelitos de ropería.
Barra por barra, moza por moza [son mozas, no?], baño por baño [si, incluso en el baño de hombres], preguntando si alguien la había visto, pero nada.
El de la barra de abajo me tenía lástima y no me cobró una cerveza.
Fuimos a Ropería a plantearles lo que me había pasado, y me dijeron "bueno, te separamos las dos camperas. Pero tenés que quedarte hasta el final, xq por política del boliche no te las podemos dar sin el papel".

07:10 am seguíamos ahí. Entre que tenía sueño y habían dos pelotudas bailando reggeton arriba de una barra, no me podía ir. Y eso era molesto.
07:30 fuimos a ropería, xq ya no aguantaba más. Discutí dos horas con la mina y con el flaco, pero no había caso.

-Vengo a buscar mi campera. ¿te acordás? la que perdió la billetera?¿
*Ah si si, pero no te la puedo dar.
-Cómo que no?! Me quiero ir, estoy Cansada y me quiero ir.
*Todavía no se fue la gente..

[Le describí la campera, incluso le mencioné el broche negro que tenía en el bolsillo derecho]

*Ok, voy a buscarla.
....

*Tu campera no está.
-¿Cómo que no está? emm vos las habias separado [a todo esto, la del Carra estaba y se la habian dado xq tenia las llaves adentro].
*No, no está.

[Le lloré, supliqué, etc. Pero no había caso. ALguna forra se llevó mi billetera con mi campera nueva].

Nos fuimos. Carra me presto su campera, con la cual parecía un oso polar, pero era abrigada y no me importaba.
Le devuelvo la campera, ya que iba para la otra parada. Y me empiezo a cagar de frío [estaba de musculosa].
El ómnibus no pasaba..

Llego a casa, helada y con calambres en la espalda [o riñones (¿?)]. Hice lo mismo que con el celular, me encerré y me dormí. [al otro día era "el día de la madre"].
No le arruiné el día a mi vieja, no podía ser tan perra.
Pero se lo arruiné a mi viejo :). Le dije y me dijo "Sos tarada? Vos tomás mucho?" a lo que mi respuesta fue "ay Papá, no seas tarado. ¿Yo? Tomar? No No. No me conocés".

"Bueno, a ver..el martes, decile a tu madre que perdiste la cédula en el liceo, pero no hagas mucho escándalo. Poné esa cara de tarada que ponés cuando te mandás una cagada"
"Y xq el martes?"
"Porque hay que dejar pasar unos días para que no sea tan obvio".